Por qué debes tomar las riendas de tu vida para estar bien y dejar de esperar al salvador

Hoy te presento el último artículo de la temporada hasta septiembre y me gustaría hablarte de un tema esencial para tu propio bienestar y que debemos tener muy claro sobre todo cuando comenzamos un proceso terapéutico.

Existe un patrón concreto que no nos permite avanzar, y este es el de “esperar a ser salvados”. A nivel de patrón de nacimiento, podemos encontrar esta pauta en personas que han sido inducidas en el parto, han necesitado maniobras o instrumentos o por cualquier circunstancia no han podido tomar la decisión ellos mismos de nacer.

Cuando este patrón se manifiesta dentro y fuera de nosotros, nos ponemos en mano de los demás y cedemos nuestra responsabilidad esperando que alguien afuera haga por nosotros lo que nosotros deberíamos hacer para estar mejor. Cuando uno espera ser salvado, haciendo más bien poco por sí mismo y dejando en manos de los demás su propio bienestar, realmente estamos engañándonos, haciéndonos creer que, efectivamente, estamos yendo al psicólogo, al terapeuta, a yoga, al gimnasio, etc, etc., pero en realidad nuestra entrega es parcial. ¿Cómo sabemos esto? Desoímos continuamente las tereas recomendadas o sencillamente no estamos al 100% presentes (siendo inconstantes, por ejemplo) en aquello que estamos llevando a cabo para nosotros mismos y, por lo tanto, no experimentamos mejoría.

Este es sin duda uno de los peores patrones que podamos presenciar, pues nos lleva a perder el tiempo (y por supuesto el dinero) a nosotros mismos y a los demás.

Y, la pregunta es, ¿Por qué ocurre esto? Porque existe cierto grado de confort en el lugar donde estamos. A esto se le denomina “ganancias secundarias”. Aquí podemos recordar el clásico ejemplo de la persona que obtiene aprobación, atenciones y “amor” cuando se siente enferma, por lo tanto, inconscientemente, propicia esta situación. Así que esta persona irá al médico, pero probablemente no acate las órdenes o lo haga parcialmente. No porque no quiera, sino porque a nivel subconsciente tiene asociada la idea de que solo estando mal le atienden, y probablemente ni se dé cuenta. Así, encontrará trabas para no llevar a cabo nada de lo propuesto.

Si eres honesto/a contigo mismo/a, podrás percibir cuáles son aquellas áreas de tu vida en las que no mejoras precisamente por mantener esta creencia en tu interior, que, por otra parte, puede ser fácilmente eliminada con coraje, valentía y consciencia. Así que si te has dado cuenta de que en algún lugar haces esto, no es momento de culparse ni castigarse; comprométete contigo mismo/a y comienza a ponerte manos a la obra, porque la verdad es que nada ni nadie puede salvarte, sólo tú puedes hacerlo.

Los psicólogos y los terapeutas estamos aquí para guiarte en este proceso empoderador de salvarte a ti mismo. Pero no sirve de nada pedir ayuda si no te ayudas. Nosotros te sugerimos dónde tienes que buscar y te damos las herramientas para hacerlo fácil y cómodamente, pero finalmente eres tú el que busca y el que se saca a sí mismo del pozo. Si realmente quieres estar mejor y disfrutar de una vida estable, feliz y amorosa, hazlo por ti y por todos los que están a tu alrededor; sé el héroe de tu propia vida.

Como siempre, me gustaría ofrecerte mi apoyo en este camino. Ya se están completando las citas para terapia individual psicológica, liberación emocional y rebirthing para Septiembre, así que no tardes en reservar tu lugar aquí.

También se abren nuevas plazas con descuento del 30% y del 10% para “Volviendo a Tu Centro”, el programa de autocuidado para el bienestar emocional. Puedes obtener más información aquí. Para saber sobre las ofertas, escríbeme.

Con mucho amor y deseando tu mayor bien,

Patricia.